Libre, con mucha salsa
y con mucho ritmo

por Xariell Sarabia y
Pablo Larraguibel

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Los últimos cinco discos grabados por la agrupación newyorrican, que se ha mantenido sobre la tarima y los estudios de grabación, con todo el respeto por la salsa brava y los ritmos del caribe desde mediados de la década del setenta, son un documento de la pasión que sienten estos artistas por la buena música.  

Después de 25 años, el Conjunto Libre ha logrado mantenerse a pesar de la hecatombe salsosa de los ochenta y volver a navegar, tan bien como ellos lo saben hacer, en la música de calidad que se está publicando a partir de principios de la década pasada. Reeditaron en 1994 su cuarto disco, Libre Increíble (del LP de 1982), que en el momento de salir al mercado deslucía un poco si se le comparaba con sus primeros tres, pero visto desde los tiempos que corren, resulta más que aceptable frente a una oferta escasa. Este CD "dedicado a la gente bella de Caracas" –después de una exitosa presentación en el Poliedro (el local por excelencia de esa ciudad), en 1981– mantiene la alineación habitual con la aparición de un trombonista newyorrican, para la época muy joven y desconocido, Jimmy Bosch, que comenzaba a labrarse el prestigio que goza actualmente. Otra incorporación fue el cantante Hermán Olivera, tomando el lugar de Tempo Alomar; en el piano sigue Oscar Hernández –quien después probaría fortuna con los Seis del Solar–; y los hermanos González, Andy, que con su bajo es la mano derecha de Oquendo, y Jerry en conga y trompeta, quien posteriormente colocaría la música tropical en lo más alto con su Fort Apache Band.

 
  El quinto CD (reeditado del LP de 1983) Sonido, estilo y ritmo, es la consagración de un trabajo madurado con los años: el laboratorio neoyorquino resulta positivo al incursionar de frente con los ritmos boricuas: la bomba y la plena. Además rescatan aquella guaracha de Pedro Hernández y Ñico Saquito, que había grabado Palmieri en sus primeros discos: Qué Humanidad, que demuestra lo que dice el propio Manny Oquendo en el folleto informativo del CD, "(...) Nuestra ejecución nunca se escucha de la misma manera. Todos somos músicos establecidos que podemos tocar e inventar. Nuestra ejecución nunca suena repetitosa porque siempre le estamos añadiendo cosas nuevas. Algunos grupos siempre tocan de la misma manera; eso es no ser creativo. Tradicionalmente, los músicos latinos siempre han improvisado y sentimos que esto es un elemento vital de nuestra música".  

En la sabrosísima plena Elena, Elena, Pupy Torres, cantante desde el primer disco, lo hace de maravilla, se comprueba que ya es un veterano, también se luce el trombón de Steve Turre. Sin duda alguna, de las mejores grabaciones del Libre, destaca el solo de flauta de Valentín en Báilala pronto, demostrando su maestría en el instrumento atravesado (prefiero, por mucho, su soltura y sabrosura cuando arremete de frente con el montuno que sus experiencias en Latin Jazz).

 
  En Ahora, sexto en la colección, con fecha de grabación 1993, se rinde justo homenaje a Machito y Mario Bauzá.
Despierta curiosidad el comprobar que este conjunto no grabó durante diez años, apretados, sin duda, por la caída del mercado de la salsa que en la década de los ochenta que cambió la brújula de las discográficas de música caribeña, orientándola hacia el merengue dominicano y creando ese nuevo producto que se conoció como salsa erótica (o mejor, balada de telenovela con tumbadora al fondo), producto de una saturación del mercado dominado por Fania Records en los setenta y muy tempranos ochenta. Pero el Libre siguió haciendo su música. En Nueva York siguió siendo un importante punto de referencia.
 

Afortunadamente, la década de los noventa, abrió nuevamente un mercado, menos masivo pero más interesado en buena música, y el Libre regresa a los estudios. Sin su cantante de todos los tiempos Pupy Torres (formó en el 93 su propia banda, La Exclusiva), el Libre incorpora a Hermán Olivera, que había tomado la alternativa en el capítulo anterior, y hace de este álbum una próspera continuación del pasado. Merecen honores, Tú me perteneces y El son, y, como uno de los pocos baches de la historia del grupo, aburre mucho un tema moralizante, Drogas fatal, que además descuadra con su tradición lírica.

 
En Mejor que nunca, 1994, se cumplen 20 años del combo y 17 de su primer disco. Se mantienen en el grupo los fundadores y directores, Oquendo y Andy González, por supuesto, el trombón de Papo Vázquez y el eterno invitado Dave Valentín. Aparece un nuevo cantante, Frankie Vázquez, y continúa el virtuoso trombón de Jimmy Bosch. Destaca el remake Tú no me quieres, más inteligente aunque igual de sabroso que la antigua versión. El rescate de la tradicional plena vuelve a funcionar con Candela. Y Sara, una danza puertorriqueña corta y precisa, únicamente tocada por un cuarteto de saxos más el redoblante obstinado de Oquendo, resalta por novedoso en el disco.  

On the move, última producción, está grabado en vivo en 1996 en San Francisco, en la costa oeste, la opuesta a su ciudad de Nueva York, a la que le rinde homenaje. Vuelve el cantante Olivera, no toca Bosch, pero se mantienen muy bien los metales de Dan Reagan y Papo Vázquez, sobretodo en Lester Leaps In, a puro pulmón con el trombón. Nostálgico y necesario el medley que contiene Por qué tu sufres, No critiques, Vengo sabroso con aproximaciones distintas a sus versiones originales, pero con el mismo sabor. las improvisaciones de trombón se deslizan por toda la grabación; Papo Vázquez, derroche en vara, capitanea la nave viento en popa y vuelve Manny Oquendo a soltar los solos con gracia y tesón, para bailar el son.

 
 

Los solos de Oquendo en cada uno de estos discos demuestran la veterana sapiencia del timbal desinflado, la afinación de los tiempos de la charanga a la francesa; sus repiques nada estridentes ni histéricos, más bien sutiles, hablan y dicen cosas con la clave y el son, para atrás y para adelante. Los silencios dentro de cada solo, manejados magistralmente, son pausas que permiten dejar de bailar y sentarse a mirar, a escuchar, a vacilar.
Para fortuna de los melómanos, se reeditó recientemente el primer disco de esta agrupación de paladines de la buena música: Con salsa, con ritmo y un recopilatorio que contiene piezas de sus primeros tres discos..

 

 

Libre increíble.
Salsoul Récords
(Edición en LP, año 1982)
(Reedición en CD, año1994)

Sonido, estilo y ritmo.
Montuno Récords
(Edición en LP, año 1983)
(Reedición en CD, año 1991)

Ahora.
Año Récords, 1993

Mejor que nunca.
Milestone Récords, 1994

On The Move (muévete).
Milestone Récords, 1996